Estados Unidos propone que Maduro y el líder opositor Juan Guaidó “se hagan a un lado” para que representantes del ‘chavismo’ y la oposición creen un Consejo de Estado que asuma el Poder Ejecutivo y guíe a Venezuela hacia unas elecciones presidenciales y parlamentarias “libres” que se celebrarían de forma simultánea en el plazo de seis a doce meses.
Abrams explicó, en una teleconferencia con periodistas, que “la única persona que no puede competir es quien ejerza de presidente interino (en el Consejo de Estado) porque en una frágil situación como la que vive Venezuela nadie se va a creer que si una misma persona está en el Gobierno y también es candidato todo va a ser justo”.
“Así que, sí, Maduro puede presentarse y Guaidó puede presentarse”, dijo el emisario norteamericano. El texto difundido por el Departamento de Estado no aclaraba este punto y su titular, Mike Pompeo, se limitó a decir que el líder opositor podría ser candidato y que el mandatario ‘chavista’ “no volverá a gobernar”, sugiriendo así que no podría aspirar a la reelección.
Abrams indicó que Pompeo hizo esa declaración porque, según los sondeos de opinión en Venezuela que maneja la diplomacia estadounidense, Maduro solo tiene entre un 12 y un 15 por ciento de apoyo. “Por eso creemos que en unas elecciones libres tiene cero posibilidades de ganar”, apuntó.
El secretario de Estado, en cambio, dijo que Guaidó era “el político más popular” del país.
Por otro lado, restó importancia al “rechazo inmediato” de Maduro al plan estadounidense. “Esperábamos que así fuera”, confesó. “Lo realmente importante no es lo que dicen en público, sino lo que pasa en privado, dentro del Gobierno, del partido y de las Fuerzas Armadas”, y lo que harán sus miembros “cuando piensen en lo que supone para Venezuela y para ellos mismos”.
Abrams hizo un llamado específico a los militares, pilar del Gobierno Bolivariano desde tiempos de Hugo Chávez. Así, recalcó que “los militares jugarán un papel importante a la hora de determinar cómo será el cambio pacífico” en Venezuela.
Los mediadores
Interrogado sobre quién podría ejercer una labor de mediación para reanudar las negociaciones entre los representantes de Maduro y Guaidó en base a esta ‘hoja de ruta’, el funcionario norteamericano señaló a la Iglesia, un actor clave en el país, y a Noruega, que ya medió en el último diálogo.
A cambio de que Maduro abandone el Palacio de Miraflores, se reconstituya el Parlamento y se renueven los poderes Electoral y Judicial con miras a unos comicios “libres”, Estados Unidos realizaría importantes concesiones al ‘chavismo’.
Las sanciones se levantarían a medida que se cumpliera el plan, se elaboraría una ley de amnistía para todos los “delitos políticos”, excepto los crímenes de lesa humanidad, y se retiraría la denuncia que seis países latinoamericanos presentaron en 2018 contra Maduro en el Tribunal Penal Internacional (TPI) por dichos crímenes.
Maduro pierde apoyo internacional
Alemania
El canciller de venezuela, Jorge Arreaza, cargó ayer contra el gobierno de Alemania por apoyar la propuesta de Estados Unidos de “transición democrática” para el país latinoamericano. Arreaza, criticó que Alemania “hace años que entregó su política exterior a Washington”, y criticó a través de Twitter que el ejecutivo alemán “en vez de enfocarse en enfrentar el COVID-19, pierden el tiempo al apoyar una propuesta inconstitucional.
Grupo de Lima
El Grupo de Lima, constituido por países de la región para impulsar un solución política de la crisis en Venezuela, mostró ayer su apoyo a la propuesta de Juan Guaidó, para constituir un gobierno de emergencia nacional que incluya a todos los sectores políticos y sociales del país”.